Hay historias que llegan a nosotras como un susurro suave en medio del caos, como una ráfaga de viento que huele a campo, a libro viejo y a sueños sin terminar. Anne with an E es una de esas historias. No solo es la historia de una niña huérfana que llega por error a Green Gables, sino la de una revolución silenciosa hecha de palabras, de imaginación, de valentía y de ternura.
Anne Shirley-Cuthbert no entra al mundo con pasos discretos. Ella irrumpe, con trenzas pelirrojas, con un diccionario en la mano y un corazón que ha aprendido a sobrevivir a punta de fantasía. Su voz aguda, su dramatismo inagotable y su necesidad desesperada de ser amada no solo la hacen inolvidable, sino profundamente humana. Anne es una niña que ha conocido el abandono, pero que se rehúsa a renunciar al asombro.
A través de ella, la serie toca temas como la identidad, el trauma, la resiliencia, la equidad de género, el amor en todas sus formas y la educación como un acto de liberación. En un mundo que espera que las niñas sean discretas, sumisas y decorativas, Anne desafía esa idea con cada palabra que pronuncia, con cada pregunta que hace, con cada idea que defiende.
Anne no quiere solo sobrevivir: quiere pertenecer. Y en ese deseo se encuentra la raíz más profunda del relato. Porque todas, en algún momento de nuestras vidas, hemos querido lo mismo: que alguien nos mire y diga "sí, tú puedes quedarte", "sí, tú importas". Green Gables, con sus campos abiertos y su luz dorada, se convierte en el escenario donde Anne florece y se permite imaginar un futuro que no sea dictado por el dolor.
Gilbert Blythe, por su parte, representa la calma que escucha, la masculinidad que cuida, el amor que se construye desde la amistad, el respeto y la admiración. El crecimiento de Gilbert no está en convertirse en héroe, sino en desaprender los prejuicios de su época y crecer como alguien que elige el bien, incluso cuando el mundo lo empuja en dirección contraria. Él no salva a Anne. Anne no necesita ser salvada. Pero se eligen, y en esa elección libre y consciente hay algo profundamente poderoso.
El viaje de ambos es uno de descubrimiento mutuo, pero también individual. Anne aprende que su voz puede ser fuerte sin necesidad de ser aprobada por otros, y Gilbert aprende que el amor puede ser una conversación infinita entre iguales. Juntas, sus historias nos enseñan que crecer es doloroso pero también hermoso, y que las personas no siempre nos dan lo que necesitamos… pero a veces, la vida sí.
Anne with an E nos recuerda que ser diferente no es una maldición, sino una forma de ver el mundo con otros ojos. Y que a veces, basta con una niña con palabras grandes y un corazón honesto para cambiarlo todo.
Escrito con amor,
para todas las Annes que fuimos, que somos,
y que aún buscan un lugar donde imaginar esté bien.
D.C
Es una de mis series favoritas, me destruí cuando supe que la cancelaron así que no me quedé ahí y me fuí en búsqueda de los libros 📚🩷 es una historia hermosa!! Me encanto tu escrito!!